Las lesiones y el estrés de la organización con problemas hasta el último momento pudieron hacer mella en el corredor
No pudo ser, la ilusión con la que Rubén Ruiz llevaba preparando más de dos años este reto, no fue suficiente para poder cumplir el objetivo de hacer los 45 km y batir el record de la hora máster, actualmente en posesión del francés Jean Philippe Meret con 44,838 km.
Su ilusión aumentaba el pasado mes de Agosto de 2009, cuando hizo un test en el velódromo de La Morgal, nada apropiado para estos fines, pista de cemento, al aire libre, etc. para batir el record de España de manera no oficial, consiguiendo una marca de 42,200 km., con unos datos, que trasladados a un velódromo con la condiciones óptimas, como lo es el de Burdeos, escogido por Rubén, quien se desplazó hasta la localidad francesa para probar y hacer unos entrenos, ponían a Rubén como claro favorito a destronar al francés. Era entonces cuando empezaba lo más duro, conseguir patrocinadores, invertir dinero en publicidad, permisos, etc. etc., sin olvidar su trabajo diario de 10 horas, recordemos que Rubén no es profesional y actualmente es consultor en el campo de la informática, y por supuesto la gran cantidad de horas de entrenamiento sacadas, todavía no sabe de dónde, con largas sesiones de carretera y muchas horas en el velódromo de Galapagar, Madrid, ya que actualmente vive en Tres Cantos. Poco a poco iba consiguiendo cosas, hasta que finalmente consiguió no tener que poner él, todo el dinero de su bolsillo, que ha sido mucho, y más o menos las cuentas le salían.
Como en todo este tipo de cosas, no todo iba a ir a sobre ruedas, y entrenando, sufrió varias lesiones importantes, fractura de mano derecha, que le tuvo mucho tiempo sin poder entrenar a pleno rendimiento, casi un mes, y nada más comenzar de nuevo los entrenos, una dura caída. Si todo esto no fuera suficiente, unos problemas el mismo lunes antes de la prueba, con la negación de facilitarle los jueces y el equipo de cronometraje por parte de la Federación francesa, algo a lo que previamente se habían comprometido, hacía que la prueba se fuera al garete a cuatro días de celebrarse, y esto ya la empezaba a pasar factura. Afortunadamente, la intervención de la Federación Española, con su presidente Juan Carlos Castaño al frente, solventó los problemas llevando jueces españoles, con el consiguiente gasto económico que nuevamente le supuso a Rubén. Todos estos imprevistos, lesiones, estrés, etc. sin que sirvan de disculpa, pudieron ser el detonante que hizo que el viernes, finalmente se acabara la ilusión de Rubén.
A las 20:00 horas comenzaba a rodar en el velódromo de Burdeos, había montado un desarrollo de 54×15, con la misma bici que había usado en la Morgal, con dos ruedas lenticulares montadas en tubular de seda especial para rodar sobre madera, y todo iba según lo previsto en las primeras vueltas, pero el caso es que poco a poco cada vez se le iba poniendo más duro a Rubén y empezaba a perder medio segundo por vuelta .- No era capaz de mover el desarrollo con fluidez, se me hacía durísimo y ya no tenía capacidad de reacción-. comentaba Rubén después de la prueba, que no encontraba explicación a lo sucedido, porque verdaderamente venía muy preparado y los test realizados daban unos números perfectos, pero hay días que uno no va y no va, tenemos la prueba en la contrareloj de Contador y el asturiano Samuel Sánchez, celebradas en el día de ayer también en Burdeos, por lo que sea no estás al 100% y no vas. Finalmente Rubén abandonó por que el reto ya era inalcanzable.
Este era el último año que podía hacer frente a este reto, el año que viene ya pasa a la categoría de máster 40, pero seguro que Rubén nos seguirá deleitando con sus retos y resultados, no olvidemos que es un gran triatleta y el próximo año 2011 se celebra en Gijón el Campeonato del Mundo y no sería de extraño ver a Rubén de nuevo rodando.